Las ventajas de construir con madera tratada La utilización de la madera en la construcción ha sido una práctica común desde tiempos inmemoriales. Sin embargo, hay situaciones en las que no se puede utilizar madera por su naturaleza sensible a la humedad o a los insectos. Es allí donde entra en juego la madera tratada. En este artículo vamos a hablar de las ventajas que se derivan de la utilización de la madera tratada en la construcción.

Qué es la madera tratada y cómo se produce

La madera tratada es aquella en la que se ha aplicado un tratamiento químico para aumentar su resistencia y durabilidad contra la humedad, los hongos y los insectos. Es un proceso que se lleva a cabo en fábricas especializadas, en las que se somete a la madera a tratamientos como el vacío y la presión, la inmersión en productos químicos o la atomización de los mismos. Los productos químicos utilizados para tratar la madera pueden ser de varios tipos, como el cobre, el arseniato, el boro, entre otros. Estos productos se aplican a la madera en forma de pasta, líquido, gas o en seco, de acuerdo al método utilizado.

Ventajas de la madera tratada

La utilización de la madera tratada en la construcción tiene numerosas ventajas que la hacen una opción atractiva para los constructores. Algunas de estas ventajas son:

Mayor resistencia a la humedad

La madera tratada es mucho más resistente a la humedad que la madera sin tratar. Esto se debe a que los productos químicos utilizados en el tratamiento son capaces de penetrar en la estructura de la madera y protegerla de la absorción de agua. De esta manera, se evitan los problemas de hinchazón, pudrición y deformación que se derivan de la exposición de la madera a la humedad.

Mayor resistencia a los insectos y hongos

La madera tratada es menos susceptible a ser atacada por insectos y hongos que la madera sin tratar. El tratamiento químico le proporciona una barrera de protección que dificulta el acceso de estos organismos a la madera. Además, los productos utilizados en el tratamiento son capaces de eliminar los organismos que ya se encuentran en la madera, evitando así su proliferación y daño.

Mayor durabilidad

La madera tratada tiene una mayor durabilidad que la madera sin tratar. Esto se debe a que el tratamiento químico le proporciona una protección contra los agentes externos que pueden dañarla, como la humedad, los insectos y los hongos. De esta manera, se alarga la vida útil de la madera y se disminuyen los costos de mantenimiento y reparación.

Versatilidad

La madera tratada es muy versátil y puede utilizarse en una amplia variedad de proyectos de construcción, desde cercas y cubiertas hasta estructuras de viviendas y edificios comerciales. Además, puede ser pintada, teñida o barnizada para adaptarse a cualquier diseño o estilo arquitectónico.

Ecología

La madera tratada es una opción más ecológica que otros materiales utilizados en la construcción, como el acero o el concreto. La madera es un recurso renovable y, si se maneja de forma sostenible, puede ser una alternativa más sostenible que otros materiales.

Conclusión

En definitiva, la utilización de la madera tratada en la construcción es una opción muy interesante para cualquier proyecto que requiera resistencia a la humedad, resistencia a insectos y hongos, durabilidad, versatilidad y ecología. Aunque la madera tratada puede ser más costosa que otros materiales a corto plazo, la inversión en ella puede verse recompensada a largo plazo en términos de durabilidad, bajo mantenimiento y ahorro de costos a largo plazo.